Caminata de 6,5 Km. en un día muy ventoso y nubes semitransparentes que tapaban parcialmente el sol. Hoy solo éramos siete de los diez que normalmente somos.
El lugar seguramente fue habitado antes pero el primer documento que cita la existencia de un castillo es del siglo XI y hace referencia a los vizcondes de Besalú, o de Bas. Pere Udalard fue el primero en llevar el título de vizconde de Bas en lugar del de Besalú. Udalard jura fidelidad a los condes de Barcelona Ramon Berenguer I y Almodis entre el 1053 y el 1066. [1] En el documento se menciona el «castrum de Castilione». El año 1078, el mismo Udalard jura fidelidad a Ramon Berenguer II, según consta en el «Liber feudorum maior». El castillo tenía un papel importante dentro del conjunto de castillos del vizcondado de Bas.
Arnau Guerau de Castellón, castlà del castillo, firma como albacea (1119) en el testamento de la vizcondesa de Besalú, Ermessenda. El 1122, es mencionado otro castlà Dalmau de Castellón, hermano de Arnau Guerau. Este vuelve a aparecer en un documento del 1155.
Muro del Castelló d'en Bas (septiembre 2012)
La historia del castillo de Castellón resto muy ligada a la casa vizcondal de Bas. Los vizcondes, sin embargo, vivieron cada vez más lejos del vizcondado y Castellón debió perder progresivamente la importancia que tuvo durante el siglo XI. [1] El 1175, el castlà Dalmau de Castellón firmó como testigo del testamento del vizconde de Bas, Hugo de Cervera, que vivía en Cerdeña. El 1197 encontramos el castlà Guerau de Castellón firmando en una concordia establecida entre el vizconde Hug y el abad Raimundo de Sant Benet de Bages. El año 1245, el castellano de Castellón, de nombre Dalmau, firma en un documento por el que el vizconde de Bas rinde homenaje al abad de Sant Benet de Bages por los feudos de la parroquia de las Presas. Otro castlà, Guerau de Castellón, casado con Sicilia, es documentado entre 1265 y 1277.
El año 1262, el vizcondado de Bas resto ligado al condado de Empúries. En 1280, el vizcondado será vendido al rey Pere II pero en 1285 será devuelto a los condes de Empúries. Una muestra de las vicisitudes por las que pasó el castillo la vemos en un documento de la época de Jaime II donde se le considera una roca y no es hasta el 1328 que Alfonso III el reconoce como castillo, poseído como alodio por vizcondes de Bas. El último documento donde se menciona un miembro de la familia Castellón es el año 1305. La viuda de Guerau de Castellón, Sicilia, hizo testigo en una venta.
El 1338, Pedro III dio a Ramon de Empúries en franco alodio los derechos que tenía sobre el castillo, derechos que volverán a la corona en morir Ramon de Empúries. En el año 1351, el vizcondado de Bas pasa a ser parte del ducado de Girona. El año 1353, el rey concedió el vizcondado de Bas a Bernat II de Cabrera; así se unieron ambos vescomtats.
En el siglo XV el castillo fue concedido por el rey Juan II a Francisco de Verntallat, caudillo de los remensas. El vizcondado de Bas, a finales del siglo XVI, pasó a la familia Moncada y en el siglo XVIII, en la casa Medinacelli.
